la moda si incomoda



Digamos que tengo dos posturas respecto a la moda: la que me encanta y la que detesto.

La que me encanta abarca todo lo que es cambiar, adoro cambiar la forma de peinarme, de forma de vestirme, viajar, ver cosas nuevas, etc. Entonces cuando se lanzan tendencias me interesa ver qué es lo que hay de nuevo; después veré si lo amo o lo odio, si me adapto a esa onda con mi onda o si me autopropongo la onda inversa. Digamos, se da un cambio y yo decido qué hago con eso.

La parte que odio es la del capricho, la de la farsa. Y en especial cuando la moda se apodera de conceptos a mi modo de ver, peligrosos. Porque poner en la boca de una marca "desarrollo sustentable" es una responsabilidad importante. Queda lindo poner una frase en una remera, pero es falso si no se hace nada. Está bueno que tenga onda cuidar el medio ambiente y replantearnos cómo vivimos para tener el menor impacto ambiental. Eso está bárbaro.
Lo que digo es que no existe un organismo que regule esto, que haga de juez y le ponga puntos o conceptos a los productos y que nos traduzca de esta forma cuánta verdad hay en esa afirmación que se hace.
Quizás si los productos tuvieran toda la info de cómo están hechos y mediante qué procesos fueron realizados, uno podría entrar en una página web y "medir" cuánto impacta esto en el ambiente. Pensando en esto, con una amiga (maju) propusimos una ecoescala, aplicada a productos que consumimos en un supermercado por ejemplo (mando un ejemplo de cómo sería la idea en las papas fritas lays). Entonces la idea era que así como elegimos por precio o cantidad, elijamos por esta nueva escala (ej: "prefiero que sea más caro, pero que contamine la mitad que este otro"). Y por sobre todo, dejaría caer la careta de las marcas que explotan este concepto, que nos toman el pelo.


El consumo responsable no es una moda, es un estilo de vida que elegimos para tener un futuro no tan peor. Los diseñadores tenemos mucho por hacer. Yo creo que si bien es un tema dificil, podemos empezar en no agregar tantos objetos al mundo, tenemos que intentar reutilizar y reciclar lo que ya hay. En esas me encuentro, investigando.


LSS

Comentarios

Entradas populares de este blog

Lambriz: no siempre es una mala palabra

Un nuevo estado de la materia: CROCANTE!

Final de mi mundo...